Los alumnos realizaron coreografías y presentaciones muy entretenidas para el público y padres de familia, quienes presenciaron alegremente el show.
Bogotá, Colombia, 14/12/2012. A pesar del frío de la noche de la sabana, que baja a temperaturas de cero grados, se dio inicio al tradicional “Christmas Show”, celebración que festeja el colegio Maximiliano Kolbe cada año, para dar inicio a la Navidad y a las vacaciones de sus estudiantes.
Todo inició con una emotiva misa para dar gracias a Dios y para pedir por el bienestar del colegio y de cada uno de sus alumnos. Luego, se rezó la novena correspondiente al 24 de diciembre, día en el que se celebra el nacimiento del niño Jesús. Se adelantó esta celebración debido a que los estudiantes para esa fecha no estarán en el colegio.
A continuación, hubo una presentación de los estudiantes del undécimo grado, quienes disfrazados de soldados romanos, hicieron una coreografía muy organizada que incluyó a dos jinetes. Aunque por momentos los caballos estuvieron asustados, las dos niñas que los montaban los supieron tranquilizar y continuar con la presentación.
Después, entraron estudiantes personificando a María y José y se ubicaron en un adorno que había sido ubicado previamente, allí quedó entonces un pesebre humano, que decorado con luces y ambientación musical, causó cientos de aplausos por parte del público.
En seguida, entraron varios jóvenes disfrazados de ángeles que realizaron una increíble coreografía en la que demostraron sus habilidades en gimnasia, un acto que muy seguramente requirió de meses de entrenamiento.
Para terminar, los niños más pequeños, disfrazados de diferentes animales hicieron una presentación que causó una gran alegría de sus padres que intentaban tomar cientos de fotografías de cada ángulo de sus hijos.
Durante todo el show el coro del colegio participó con diferentes canciones que ambientaban cada presentación. Así mismo, una niña de primaria cantó un villancico, que dejó a todo el público impactado por la hermosa voz de la pequeña, su padre orgulloso filmaba a su hija con lágrimas en sus ojos mientras presenciaba el acto.
Todo finalizó con cientos de aplausos, abrazos interminables y sonrisas, “el frío se había olvidado”.