Luis Alberto Vega de la Mora en Educación XXI
Recientemente se dieron a conocer los ganadores de la decima edición del Premio Santander a la Innovación Empresarial, instituido en reconocimiento y apoyo al talento de estudiantes universitarios. Para saber más de esta iniciativa, en la emisión del pasado sábado de Educación XXI por W-Radio, Leonardo Kourchenko conversó con Arturo Cherbowski, director general de Universia, así como con integrantes de tres de los proyectos ganadores.
Enlazado por vía telefónica, Arturo Cherbowski señaló que se trata del premio más importante para emprendedores universitarios en todo el país y destacó el crecimiento en la participación, de 450 proyectos en 2005, a más de 4,500 en 2015, de 185 universidades. Consideró que la vinculación universidad-empresa es un tema de muchos años, que pasa por la pertinencia de los currículos, el emprendedurismo y la innovación. Los estudiantes además de formarse para lograr un buen empleo también lo hacen para ser empleadores o –agregó Leonardo–, autoemplearse.
Explicó Cherbowski que se premian tres lugares (con 500, 200 y 100 mil pesos), en cada una de las dos categorías: Innovación empresarial e Impacto social. Los proyectos recibidos abarcaron un amplio espectro, incluyendo las áreas de salud, biomedicina, conservación, energía, recursos naturales, , tecnologías de la información y la comunicación y muchas otras. Los ganadores los decide un panel de expertos en desarrollo de negocios y emprendedurismo social. No sólo se evalúa si es rentable a largo plazo sino también los beneficios que trae a la sociedad o el entorno en que se desarrolla. En complemento, se otorgan además becas para programas de emprendedurismo en una prestigiada universidad estadounidense.
En la cabina de W-Radio, Leonardo recibió a uno de los ganadores, Luis Alberto Vega de la Mora, Ingeniero eléctrico y electrónico por la UNAM y actualmente terminando una maestría en administración, quien con un grupo de colaboradores obtuvo el tercer lugar con el proyecto “Control total de energía”.
Luis Alberto explicó que el proyecto –orientado a los hogares y a pequeñas empresas–, tiene por objeto que los usuarios de energía eléctrica y de gas paguen menos. Con un software, dijo, visitamos a los clientes y revisamos donde tienen fugas y deficiencias de sus equipos. Se realizan mediciones y levantamiento de datos que procesan y analizan para presentar una propuesta en 24 horas, la cual si se acepta dará lugar a las acciones correctivas y el subsiguiente monitoreo. Existen además estrategias tarifarias, sobre hábitos de consumo y de cambio de proveedor en al caso del gas. Su empresa, ‘300 mil soluciones en energía’, está en fase de preoperación y están en busca de mayor inversión para continuar.
El proyecto ganador del primer lugar en innovación fue el de Semka Biomedical Technology y, desde Monterrey, Paola Velarde egresada de Negocios Internacionales del Tec, comentó que junto con su equipo descubrieron que faltaban herramientas para que los médicos pudieran decidir qué tratamiento aplicar a sus pacientes de cáncer. Explicó que, en su proceso de crecimiento, el tumor suelta células en el torrente sanguíneo y, mediante el dispositivo que desarrollaron, con una muestra de sangre del paciente es posible asilar las células vivas del tumor de manera que pueden ser estudiadas en patología y determinar sus características para que el médico decida qué tratamiento aplicar. Similar a los aparatos que miden la glucosa, el dispositivo –eficiente y de bajo costo–, es una caja con una unidad de control electrónica donde se introduce la prueba de sangre. El aparato fue probado en ambiente controlado de laboratorio y próximamente harán pruebas clínicas con pacientes. El objetivo, dijo Paola, es ayudar a la gente, aumentarles la esperanza de vida recibiendo tratamiento adecuado y oportuno.
Por último, desde Jalapa, Veracruz, José Manuel Sánchez, ingeniero mecánico eléctrico de la Universidad Veracruzana describió el proyecto Laynko, que obtuvo el primer lugar en la categoría de impacto social. Junto con compañeros de la propia Universidad Veracruzana, del Tecnológico de Minatitlán y del Tecnológico de Orizaba, diseñaron una prueba para mejorar métodos de diagnóstico médico en enfermedades gastrointestinales, que representan la quinta causa de muerte en el país, en particular en infantes. La prueba es similar a la de embarazo y consiste en un reactivo químico que puede detectar –en 15 minutos a partir de una muestra de orina–, cuatro enfermedades: salmonela, e-colli, rotavirus y amibiasis. El grupo está conformando una empresa, el dispositivo en proceso de patente y ya realizaron pruebas en laboratorio, a las que seguirán las pruebas clínicas en hospitales.
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